Una vez más, la vida es una telenovela y prueba de ello son los anuncios de prensa estilo publicidad que utilizan las corporaciones para motivar a las mujeres a comprar sus productos.

Por mi parte, esas noticias no me motivan sino me inspiran para escribir mis ya famosos comerciales-telenovelas, y esta vez, le doy las gracias a una compañía de productora de harinas, por inspirarme a escribir: Una Mujer Seca y sin Masa.

Bajo el titulo ¡Agrégale diversión a tus reuniones familiares ahorrando dinero! la noticia de la empresa productora de hariana señala: “No dejes que la crisis económica te impida realizar tus reuniones y fiestas familiares favoritas. Hoy como siempre, está a tu lado, en tu cocina, en tu mesa y para apoyarte en las necesidades prioritarias. Aquí te tenemos unas recomendaciones simples para que tu próxima celebración familiar no afecte tu presupuesto y mantengas la tradición hispana de celebrar en familia”.

Pero, la telenovela comienza…

Cuando Julieta terminó de leer la noticia sintió una terrible sensación en su cuerpo, no sabia exactamente que era, pero su garganta se sentía seca y la sensación de soledad, que tanto le había costado superar, le había regresado ya que nadie de su familia estaba a su lado, ni en la cocina, ni en la mesa ni apoyándola en las necesidades prioritarias.

Decidió sentarse en la mesa a reflexionar, como lo ha venido haciendo desde que comenzó la crisis económica y desde el día que descubrió que estaba oficialmente deprimida.

Equilibrar las cuentas la ha ayudado a tapar el hueco que aparece mensualmente en el presupuesto, pero ahora gracias a esa noticia, se abrió nuevamente el hueco que la mayoría de las mujeres inmigrantes tienen y que le había tomado tantos años tapar en su corazón.

Con pañuelo en mano decidió esperar por las lágrimas que brotaran de sus ojos, pero nada salió, ni una sola lagrima. Suspiro y dijo en voz alta: Me he vuelto una mujer Seca.

Decidió leer las recomendaciones para entender mejor eso de “agregar más diversión a la vida” y así tal vez, entender el por qué se le han secado sus lagrimas.

Se limpió ruidosamente la nariz y leyó en voz alta:  “Planea con anticipación tus fiestas – eso lo puedo hacer dijo – compra las cosas con tiempo y considera celebrar dos eventos en la misma fiesta. Hizo una pausa y dijo:

Pero ¿Cómo puedo hacer Halloween y Thanksgiving en una misma fiesta?

Hizo una mueca y continuó leyendo: “Trata de reducir tu lista de invitados: haz tú misma las invitaciones y repártelas personalmente, ya que así te ahorrarás el costo de los timbres del correo¨.

Se levantó de la mesa y mirando el cielo dijo: ¿Cómo puedo reducir mi lista de invitados? ¿Cómo dejar afuera a mis amigos, que son mi familia?  – no me parece, dijo medio indignada. Además, si los puedo invitar por teléfono o por correo electrónico, ¿Por qué tengo que repartir las invitaciones personalmente? ¿Qué es mejor, ahorrar gasolina o ahorrar en timbres del correo?

Suspiró y se preguntó – ¿Será que por ser tan práctica me he Secado?

En eso llegó Pedro y encontró a Julieta con las manos hacia arriba como si estuviera esperando respuesta de las alturas y le preguntó: ¿Qué te pasa?

Julieta, aclarándose su seca garganta le contestó: Nada, lo que pasa es que descubrí que soy una MUJER SECA Y SIN MASA.

Su esposo la miró asombrada, leyó la noticia y le dijo: Primero, esa no es la masa que usas para hacer las Arepas y segundo, sabes muy bien que te prohibieron las harinas porque tienes lostriglicéridos altos. ¿Por qué haces de esto una telenovela?

Tienes razón – respiró Julieta y le respondió – No necesito una masa a mi lado que me apoye en mis necesidades prioritarias, pero si necesito unas buenas amigas que quieran llorar conmigo cortando cebollas.

De inmediato les mando un mensaje de texto a sus amigas para invitarlas a agregarle más diversión a su vida llorando mientras cortan cebollas y a ver si preparando una buena sopa la ayudan a tapar ese bendito hueco que apareció nuevamente en su corazón.

FIN

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Artículo publicado en Mujer Latina Blog el 28 de octubre del 2009